viernes, junio 15, 2007

Cosa necesaria que había que poner aquí:

¿Qué le dice Batman a Robin para que se suba al Batmóvil?

¡Sube Robin!

4 comentarios:

Gluglupita Aquamarino dijo...

odio ese chiste T_T

Anónimo dijo...

O es jodidamente absurdo o no lo pillo :___

Shakeb dijo...

Pues a mi me encanta xDDD

Anónimo dijo...

A ver este:

Paco entra en el bar y ve a Juan al final de la barra con una sonrisa de oreja a oreja. Se acerca y le pregunta:

- ¿De que estás tan contento, Juan?.

- Ya verás, Paco, necesito contarlo... estaba calafateando mi barca, sólo calafateaba mi barca y se acerca una rubia, ¡que rubia!, ¡tetas hasta aquí!, Paco, ¡tetas hasta aquí! y me pregunta:

. "¿Me das un paseo en tu barca, guapo?"

. "Claro que sí, hermosa" -respondí- y zarpamos.

Bastante lejos, paré el motor y dije:

. "Nena, elige: follar o nadar".

Y no sabía nadar, Paco. ¡No sabía nadar!.

Unos días más tarde, Paco vuelve al bar y allí está Juan aún más contento que la vez anterior, riendo y cantando. Se acerca a preguntarle el porqué de tanta alegría.

- Ya verás, Paco, necesito contarlo... estaba calafateando mi barca, sólo calafateaba mi barca y se acerca una pelirroja DE MIEDO, ¡que pelirroja, ¡Dios Bendito!, ¡tetas hasta aquí!, Paco, ¡tetas hasta aquí! y me pregunta:

. "¿Me das un paseo en tu barca, guapo?"

. "Claro que sí, hermosa", -respondí- y
zarpamos.

Bastante más lejos esta vez. Paré el motor y dije:

. "Nena, elige: follar o nadar".

Y no sabía nadar, Paco. ¡No sabía nadar!.

El día siguiente, Paco vuelve al bar y allí está Juan llorando como una magdalena sobre un lingotazo fuerte y síntomas de que no es el primero.

- ¿Qué ha sucedido, Juan? ¡Cuenta!.

- Ya verás, Paco, necesito contarlo... estaba calafateando mi barca, sólo calafateaba mi barca y se acerca una morenaza DE AQUÍ TE ESPERO, ¡que
MORENAZA, Santo Dios Omnipotente!, tetas HASTA AQUÍ!, Paco, ¡tetas HASTA AQUÍ!, ¡se me puso más tiesa que el mango de mis remos! Y me pregunta:

. "¿Me das un paseo en tu barca, guapo?".

. "Claro que sí, hermosa", -respondí- y zarpamos.

Aún más lejos esta vez. Paré el motor y dije:

. "Nena, elige: follar o nadar".

Enseguida se desnudó... y, tío, la suya también estaba tiesa y además era tan larga como el mango de mis remos!

Y yo no sé nadar, Paco.¡Yo no sé nadar!