lunes, agosto 23, 2010

The Duke of Death.

Recientemente (y no tan recientemente también) me ha dado por leerme comics de Marvel. En la última saga que me he leído Spiderman muere, pero no pasa nada, esto es Marvel, es como la historia de Mortal Kombat o de Dragon Ball, resucitar es más fácil y más barato que ir al cine. El caso es que Spidey resucita, pero tiene que aceptar completamente su parte araña ante La Gran Tejedora (que viene siendo un dios araña).

Todo esto es para meteros (meterte, mejor dicho) en situación.

Gracias a todo esto de volver de la muerte y aceptar su parte araña, Spiderman desarrolla nuevos poderes: más fuerza, más agilidad, un sentido arácnido mejorado, visión en la oscuridad, los pelos se le erizan para sentir la dirección del viento, ya no necesita cartuchos de fluído arácnido para lanzar telarañas y puede sentir las vibraciones de todo lo que toque su tela. Pero hay algo más... le salen unos aguijones de unos 40 cm. de largo en caso de peligro extremo que inyectan veneno. Con ese último descubrimiento Spiderman se pregunta "¡¿Aguijones?! ¡Las arañas no tienen aguijones!". Y a esto último una especie de ente antropomórfico formado con arañas-piratas (sí, piratas) le responde que en este momento las arañas no tienen aguijones, pero que evolucionarán en el futuro para tenerlos, y que el señor Parker ha evolucionado.

Vale, esto también era para meterte en situación.

Yo creo firmemente que si a Spiderman le hubiese picado un pato y fuese Duckman no necesitaría evolucionar, porque ya estaría en el pináculo de la evolución.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Eres lo peor xDDDDDDD Lo tuyo con los patos es enfermizo, déjalo ya JaJaJaJa

Fdo.: El lobo asustao